Cada mañana empiezo tratando de imaginar que hoy atrapare la mariposa del amor se acerca con sus colores brillantes quedo en minutos extasiada de soñar, que le diré podre acaso sostenerle el vuelo o la dejare pasar. ahh esos breves momentos son siglos de felicidad, una mirada suya con ese abanico tan espesas pestañas por dios porque la naturaleza dota a un hombre de tan buen atributo.... mm a lo mejor es un muro para que realmente yo no pueda ver su alma de sapo verde y gordo.
el aire se encarga de llevarme los pocos besos que le puedo robar quisiera atraparlos en bote de cristal y así abrirlos poco a poco cuando yo quisiera y tomarlos en mis horas de encantamiento y poder soñar en mi castillo.
La felicidad es tan breve que hay que disfrutarla saborearla y digerirla.
Estoy parada viendo el ir y venir de las mariposas pero ninguna se acerca a mi.